La vendimia ha llegado y se ha ido en Valdecuevas, pero el trabajo está lejos de terminar. Después de la recolección de las uvas, comienza una fase igualmente crucial en la creación de nuestros vinos.
Después de la extracción del mosto, comienza el proceso de fermentación. Para nuestros vinos, la fermentación suele ser lenta y a baja temperatura, lo que permite conservar los delicados aromas y sabores de la uva Verdejo. La fermentación puede tener lugar en tanques de acero inoxidable o en barricas de roble, como nuestro Valdecuevas Fermentado en Barrica, dependiendo del estilo del vino que se busca. Este es un momento crucial en la elaboración del vino, ya que es donde se desarrollan muchos de los matices y características que hacen que los vinos de Valdecuevas sean únicos.
La crianza y el envejecimiento
En estos momentos los vinos están descansando sobre sus lías en suspensión, en todos nuestros vinos, desde los más jóvenes. Durante este período, los vinos maduran y desarrollan sus aromas, manteniendo sus aromas primarios frutales que se combinan con los toques de vainilla y especias aportadas por la madera.
El Embotellado y la dulce espera
Finalmente, después de meses de cuidadosa elaboración, llega el momento del embotellado. Nuestros vinos se envasan con esmero en botellas que se sellan para mantener la frescura y la calidad. Sin embargo, estos vinos a menudo necesitan un período de descanso en la botella antes de estar listos para su consumo. Esta espera puede ser una prueba de paciencia, pero los resultados son extraordinarios.
Cada botella cuenta una historia única de la tierra, el clima y la habilidad de Antonio Nieto, nuestro enólogo. Así que, la próxima vez que descorches una botella de vino Valdecuevas, recuerda todo el trabajo y el arte que hay detrás de esa copa, y disfruta de cada sorbo como si fuera un tesoro recién descubierto.